Los Knicks apuestan por el rookie Allonzo Trier, y bien que se lo merece. El equipo neoyorquino ha convertido el contrato dual que le une a Trier en un contrato estándar con 2 años de duración, tal y como avanzó Shams Charania (The Athletic) y confirmó poco después el propio equipo de forma oficial.
Para hacer hueco a ese contrato estándar en la plantilla, New York ha tenido que desprenderse de un jugador. El damnificado ha sido el base Ron Baker, que apenas cuenta esta temporada en la rotación de David Fizdale.
Allonzo Trier está haciendo una gran temporada. Tras brillar en la NCAA con Arizona, Trier no fue seleccionado en el draft de 2018, pero eso no le ha supuesto inconveniente alguno a la hora de entrar con fuerza en la liga.
Con un contrato dual, el escolta novato de 22 años ha jugado ya 27 partidos con Knicks en los que está promediando 11,3 puntos y 3,1 rebotes con un 39% de acierto desde el triple. Esos números le han valido la confianza de la franquicia y este nuevo contrato.
Baker, mientras, cumple su tercera temporada en los Knicks, pero su presencia en la pista ha ido decayendo desde su campaña de novato, que fue donde más brilló. Suma 92 partidos con los Knicks, pero esta temporada solo ha jugado 11 con una pobre media de minutos en la cancha.