El Rockets-Grizzlies de anoche suponía el estreno en pretemporada de ambos equipos. Pero también llevaba emparejadas otras cuestiones. Dos por encima de todas: el debut de Carmelo Anthony con Houston y el regreso al juego de Mike Conley.
Houston impuso su ley. Su baloncesto ofensivo. Su ritmo de juego. Ganó 131-116. Con un Chris Paul estelar. Se vio el base a un gran nivel. Sumó 22 puntos, 9 asistencias y 5 robos. Y metió 5 triples de 6 intentos. James Harden añadió 20 tantos. Pero perdió 8 balones.
Una gran nota para la esperanza fue la resurrección deportiva de Michael Carter-Williams. Acabó con 19 puntos en 21 minutos. Y con muy buenos porcentajes de tiro. Algo inhabitual en él.
Carter-Williams debutaba con Houston. Como lo hacía Marquese Chriss. Lo hizo bien el joven jugador. Y como lo hacía Carmelo Anthony.
Melo se llevó los focos. Fue titular. Jugó 23 minutos. Firmó 13 puntos, 4 rebotes y 2 robos. Lanzó bien a canasta. Metió 3 triples. Se le vio contento.
El regreso de Conley
La gran noticia para Memphis fue el regreso de Mike Conley. El base llevaba 10 meses y medio sin jugar. La pasada temporada solo disputó 12 partidos. El último lo jugó el 13 de noviembre de 2017.
Todo fue mejor de lo esperado. Conley no solo regreso, sino que se le vio muy bien. Logró 16 puntos en 23 minutos. Asumió protagonismo.
Los Grizzlies tuvieron más notas positivas. El buen tono de Chandler Parsons fue una. Y el gran estreno del novato Jaren Jackson Jr., otra. El rookie firmó 15 puntos en 19 minutos. No falló un solo tiro. Eso sí, cometió 6 faltas.
Mucho peor tono mostró Marc Gasol. Hizo 2 puntos en 22 minutos. Con 1 de 7 en el tiro.