No ha podido ser. Lonzo Ball tendrá que pasar por el quirófano. El jugador de Lakers arrastra una lesión de menisco. Y esa lesión le obligará a someterse a una artroscopia. Será el próximo martes. La rodilla afectada es la izquierda.
La operación ha sido anunciada por su equipo.
El jugador se dañó en su momento el menisco. Una vez acabada la temporada intentó diversas opciones para evitar la cirugía. Una de ellas fue un tratamiento con inyección. Le inyectaron en junio plasma enriquecido. Pero no ha sido suficiente.
Ball retomó la actividad deportiva el pasado mes. Pero su regreso a la pista resultó muy breve. No consiguió dejar atrás las molestias en la rodilla.
El número 2 del draft de 2017 no jugó ya en el mes de abril. Solo disputó 52 partidos en su primera temporada. Y ahora solo piensa en estar listo para la siguiente.