La audiencia de televisión del Partido de las Estrellas no creció con el nuevo formato impulsado por la NBA. El número de telespectadores descendió ligeramente con respecto a los registrados en 2017, si bien la coincidencia con los Juegos Olímpìcos de Invierno pudo influir.
El nuevo formato, eliminada la confrontación clásica Este-Oeste, congregó en la televisión una media de 7,7 millones de telespectadores, según informó Turner Sports, encargada de la retransmisión deportiva con su canal TNT.
Esa cifra es ligeramente inferior a la del año pasado, pero superior respecto a la última vez que el All-Star Game coincidió con los Juegos Olímpicos de Invierno. Fue en 2014 y entonces hubo una media de 7,5 millones de televidentes.
Hubo, sin embargo, aspectos muy positivos desde el punto de vista mediático. Por ejemplo, creció la expectación entre la franja de edad situada entre los 18 y los 34 años y aumentó en más de un 37% el consumo de vídeos del partido a través de las redes sociales.