Los Sixers se han impuesto en el Madison Square Garden a los Knicks dejando así atrás una horrible racha de resultados que ha incluido 5 derrotas en los 5 últimos partidos. Los de Brett Brown han vencido 98-105 con Joel Embiid y J.J. Redick al frente.
La participación de Embiid y Redick estuvo en el aire hasta el último momento, pero llegado el partido su presencia resultó capital en el triunfo de los suyos.
Embiid sumó 25 puntos, 16 rebotes y 3 tapones tras alcanzar los 34 minutos de juego. Con él, Sixers hizo en pista un +23. Redick acabó con 24 tantos y 4 triples y su equipo hizo un +25 con él en cancha.
Los visitantes ganaron a pesar de la imprecisa jornada de Dario Saric, la intrascendencia en ataque de Robert Covington y el gris partido de Ben Simmons. En el lado opuesto, los muy buenos minutos desde la suplencia de T.J. McConnell, autor de 15 puntos y aportando en bastantes facetas del juego.
Un gran Kanter
La gran estrella local fue Enes Kanter. Simplemente espectacular con 31 puntos y 22 rebotes (su mejor marca anotadora de la temporada y la mejor reboteadora desde que está en la NBA).
Además, 22 puntos y 5 tapones de Kristaps Porzingis, mal en el tiro, y 20 puntos de Courtney Lee en otro partido en el que Willy Hernangómez no ha visto pista.
La escasa amenaza exterior de los locales, con solo 4 triples anotados, facilitó el trabajo defensivo de unos Sixers que necesitaban el triunfo como agua de mayo, un triunfo que les hace respirar un poco.