El agente libre James Young ha encontrado un punto de apoyo y ese punto de apoyo se llama Milwaukee Bucks. El joven alero ha llegado a un acuerdo para afrontar la pretemporada con el equipo de Jason Kidd. Su objetivo no será otro que intentar hacerse un hueco en la plantilla.
Young, ex de Kentucky de 22 años, aterrizó en la NBA como número 17 del draft de 2014, pero en sus 3 años como profesional ha sido incapaz de labrarse un nombre en la mejor competición del planeta.
Sus mejores prestaciones llegaron como novato, sin brillar, pero luego no fue capaz de mejorar su juego y no obtuvo demasiadas oportunidades.
Jugó con Celtics 89 partidos (31, 29 y 29 en las 3 campañas, respectivamente). Y apenas promedia en su carrera NBA 8,4 minutos por partido.
Donde sí ofreció buenos números fue en la antes llamada Liga de Desarrollo, al brillar con Maine Red Claws.