Nicolás Brussino anda estos días concentrado con la selección argentina tras vivir un verano convulso en el que se vio, de repente, fuera de la NBA y vivió días después la alegría de estar de nuevo en la mejor liga del mundo. Porque ya no es jugador de Dallas. Ahora está en Atlanta.
El joven Brussino ha concedido una entrevista a la web oficial de la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB) en la que narra su primer año en la NBA, su salida de los Mavericks y su llegada a los Hawks.
"Muy positivo". Así resume su aún corta estancia en la competición estadounidense. "Tuve oportunidades y supe aprovechar los pocos minutos del comienzo para después, en el final de la temporada, contar con una buena cantidad de minutos. Ahí mostré todo lo que había aprendido en la temporada".
El año en la NBA le ha hecho mejorar en muchos aspectos del juego. También en su fuerza mental. "Creo que mi juego ha cambiado mucho. En la Liga Nacional necesitaba la pelota para hacer mis puntos y generar juego al equipo. En la NBA no tuve esa oportunidad. Ellos me pedían que tirara o pasara, y no jugué tanto tiempo con la pelota en la mano".
Eso le obligó a mejorar su juego sin balón, sus movimientos en la cancha, y la falta de minutos y continuidad fortalecieron su mentalidad.
Salida de Dallas
Brussino no esperaba ser cortado por los Mavericks. "Estaba en la Summer League cuando me enteré que estaba en duda. La pasé mal durante unos días", reconoce.
Después se lo comunicaron: "No la esperaba nadie esta noticia. Durante el año recibí elogios del equipo, las cosas las hice bien... pero bueno, la NBA es así. Es difícil ese momento", explica.
Llegada a Atlanta
Al poco de ser despedido, Atlanta Hawks le reclamó de la lista de cortados. Una gran alegría para Brussino: "Sinceramente, no me lo esperaba, cualquier equipo era bienvenido. Pero está bien que me eligieran así".
"Me siento un jugador de rol en la NBA", indica el argentino, que asegura que "es lindo jugar en la NBA" y que se siente optimista de cara a su incorporación a Atlanta Hawks.
Sus objetivos de cara a la próxima temporada: sumar experiencia, ganarse un puesto en el equipo y aprovechar sus minutos. Brussino sigue en la meca del baloncesto.