La debacle de Cleveland Cavaliers en este final de temporada parece no tener fin. Tyronn Lue tenía un dilema. LeBron James y Kyrie Irving arrastraban problemas y no quiso forzar sus físicos, pero no lo hizo en un momento muy delicado de la temporada.
Sin ellos y sin Tristan Thompson, Cleveland no remontó el vuelo. Segunda derrota consecutiva en la prórroga y segunda derrota perdiendo ventaja en el cuarto final. Esta vez, 11 puntos en Miami, nada que ver con los 26 de la jornada anterior.
El equipo tiene una dependencia abusiva de LeBron James. Lo dicen el calendario y los resultados: ¡7 partidos sin LeBron esta temporada y 7 derrotas! La de anoche, unida a la victoria de Boston ante Brooklyn, deja el liderato del Este en manos de los Celtics. Cleveland tiene un problema serio.
El rival, mientras, se lo jugaba todo. Si Miami perdía se quedaba fuera de playoffs, y apuró su suerte el equipo de Erik Spoelstra hasta ganar 124-121 en la prórroga. Heat sigue 9º con 40-41 empatado con Bulls (40-41). Les antecede Indiana Pacers con 41-40. Todo está en el aire.
Partidazo inservible de Williams
Sin Irving, surgió el mejor Deron Williams de la temporada, un D-Will que recordó a sus tiempos de MVP. Williams ejerció de titular, estuvo 46 minutos en cancha y acabó con 35 puntos, 9 asistencias y 7 rebotes. Metió 5 triples, estuvo por encima del 50% en el tiro de campo y solo tuvo un pero, grande eso sí: perdió 10 balones.
Ni su partidazo, ni los 25 puntos y 10 rebotes de Kevin Love, ni los 21 de Channing Frye sirvieron para ganar. Tampoco los 18 de Kyle Korver desde la suplencia. Incluyendo su trabajo en el rebote y su acierto desde el triple. Decepciontante actuación de J.R. Smith en un momento importante en el que se le pedía dar un paso adelante.
Con 108-108, Williams perdió el balón en la jugada final del tiempo reglamentario. Partido a la prórroga y en ella derrota. Un triple del propio Williams empató a 120 con 34 segundos por jugar, pero luego erró D-Will con 122-121 en el marcador y falló Frye el triple final con 124-121 en el luminoso. Adiós al partido.
Miami sobrevive en el Este
Miami Heat sobrevivió a su particular 'match ball'. Lo hizo con un gran Tyler Johnson, que anotó 24 puntos desde la segunda unidad, con la consistencia en tableros de Hassan Whiteside (23 tantos y 18 rebotes), con la aportación de Josh Richardson -19 tantos- y con la generosidad de James Johnson -16 puntos y 9 pases de canasta-.
El equipo de Spoelstra igualó el 80-91 con el que empezó el cuarto final y a partir de esa remontada construyó su supervivencia.