A DeMarcus Cousins se le vio motivado. Tanto que el pívot protagonizó una espectacular actuación. El rival no era otro que su equipo de toda la vida en la NBA: Sacramento Kings. Era su primer cara a cara con Sacramento tras su traspaso. No se cortó un pelo.
Victoria holgada de Pelicans. Por un rotundo 117-89. Y Cousins como auténtico MVP del partido. Haciendo 37 puntos y 13 rebotes. Metiendo 5 triples de 8 intentos. Robando 3 balones. Dominando el juego. Sus excompañeros sufrieron en sus carnes el baloncesto del díscolo jugador, ahora en Nueva Orleans.
El partido tuvo poca historia más allá de Cousins. New Orleans ya dominaba el luminoso por 20 al descanso (58-38).
Además de Cousins, buen partido de Anthony Davis. Sumó 19 puntos, 12 rebotes y 5 tapones. En un día más que gris de Jrue Holiday.
Ben McLemore fue el mejor visitante. Con 15 tantos y 8 rebotes. Y Willie Cauley-Stein firmó un doble-doble.