Los aficionados de Minnesota se las prometían felices ayer camino, bajo un cálido sol primaveral, del partido entre Timberwolves y Trail Blazers. Pero ese buen tiempo, inusual en esta época, fue una de las causas de que, finalmente, el encuentro no pudiera celebrarse.
El partido que tenían que disputar Wolves y Blazers en el Target Center de Mineápolis tuvo que suspenderse debido al mal estado de la pista. La superficie de juego estaba demasiado resbaladiza como para garantizar la integridad física de los jugadores debido a la humedad producto de la condensación.
El cálido tiempo reinante en la ciudad, cerca de 20ºC de temperatura cuando la máxima en esta época no supera los 5ºC de media, se conjuntó con la reciente instalación de una pista de hielo bajo la de baloncesto para generar más humedad de la deseable.
La pista de hielo se había instalado recientemente con motivo de un espectáculo de Disney sobre Hielo y de la próxima celebración de un torneo universitario de hockey sobre hielo.
De momento, no se ha establecido nueva fecha para la celebración del encuentro suspendido. Es la segunda ocasión en la presente temporada en que el mal estado de la pista obliga a aplazar un partido de la NBA. El pasado 30 de noviembre hubo de suspenderse el partido que debía enfrentar a Sixers y Kings en Filadelfia.