Una bestialidad tras otra. Así se transmite a la pista el baloncesto de Russell Westbrook esta temporada, una transmisión que termina muchas veces en victoria de su equipo. Anoche, no. Derrota en Phoenix con una actuación magistral, pero insuficiente, del base.
¡Westbrook logró 48 puntos, 17 rebotes y 9 asistencias! Lanzó 30 tiros de campo rozando el 50% de acierto y metió 17 de 18 tiros libres. Fue otro partido colosal sin premio de un jugador que sigue promediando un triple-doble en la temporada y que suma ya 4 partidos consecutivos sin bajar de 40 puntos.
El último que encadenó 4 partidos seguidos sin bajar de 40 fue Kobe Bryant en enero de 2012 y, según Elias Sports Bureau, solo 9 jugadores han conseguido una racha así en la historia de la NBA, entre otros Wilt Chamberlain y Michael Jordan.
Además, Westbrook lleva ya 10 partidos esta temporada con 15 o más rebotes. Se sitúa en el Top 10 de esa lista a nivel histórico... ¡siendo base y quedando más de un mes de competición! Resulta alucinante.
Derrota en Phoenix
Todos esos números imposibles no se tradujeron en victoria. Ganó Phoenix 118-111 con 6 jugadores en 14 o más puntos. Eric Bledsoe encabezó la lista con 18 puntos, aunque no estuvo firme en el tiro, Devin Booker anotó 17, si bien perdió 6 balones, y Alan Williams se fue a 14 tantos, 13 rebotes y 3 tapones desde la suplencia. Está en una forma fantástica.
Se unieron a la fiesta el titular T.J. Warren y los suplentes Tyler Ulis y Leandro Barbosa, formidables ambos.
En Thunder, nadie acompañó a lo grande a Westbrook. De hecho, su segundo anotador fue el español Álex Abrines, que no para de crecer en la NBA. Hizo 13 puntos en 33 minutos tras ser de nuevo titular y meter 3 triples.