A veces pensamos que las estrellas saben perfectamente los movimientos que se hacen en los despachos de sus equipos, pero no siempre es así. Al menos, eso es lo que se desprende de las francas declaraciones que ha hecho Damian Lillard a raíz del traspaso de Mason Plumlee.
No parece que Lillard supiera nada del traspaso a tenor de su reacción, que ha sido de sorpresa y de tristeza. El base ha reconocido que la marcha de su compañero resulta "dura".
"Mase (Plumlee) era uno de nosotros, como un hermano para mí. Tengo un gran vínculo con Mase tanto dentro como fuera de la cancha. Me molestó verle marchar. Le vamos a echar de menos", ha declarado Lillard.
El base confesó que Plumlee es uno de sus compañeros de equipo favoritos a lo largo de su carrera, de ahí la expresión de tristeza con la que encajó la marcha del pívot.
Plumlee fue traspasado a Denver Nuggets llegando en su lugar a Portland el pívot bosnio Jusuf Nurkic.