LeBron James está enfadado. No es para menos. Su rendimiento personal no para de crecer y su equipo no para de perder. Es la triste realidad. Anoche, otro triple-doble del Rey y otra derrota de Cleveland. ¡Esta vez en casa ante Sacramento tras prórroga! Al final del encuentro: 112-116.
LeBron firmó 24 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias. Su quinto triple-doble de la temporada y segundo consecutivo. Porque ante Pelicans hizo 26 tantos, 10 rebotes y 12 asistencias para perder también.
Derrotas ante equipos menores -Pelicans y Kings- y un mes de enero aciago. Cleveland lleva una marca de 5-7 en el año 2017. ¡Ha perdido sus 3 últimos partidos! ¡Y ha caído 6 veces en sus últimos 8 compromisos! La crisis de resultados pasa por un trabajo defensivo muy deficiente.
Un esfuerzo sin premio
Anoche, más de lo mismo. LeBron a un nivel notable. Kevin Love en 21 puntos, 16 rebotes y 5 asistencias. Kyrie Irving sumando 20 tras venir de anotar 49. Hasta Iman Shumpert y Kyle Korver rindieron bien en ataque. Pero la defensa, una ruina.
Los Pelicans jugaron sin Anthony Davis. Y anoche los Kings lo hicieron sin el lesionado Rudy Gay. Eso sí, DeMarcus Cousins se fue a 28 puntos, 11 rebotes y 9 asistencias. Y Darren Collison anotó 23.
James está haciendo un esfuerzo máximo por involucrar a sus compañeros. No se está mostrando nada egoísta. Limita sus tiros y promedia 8,4 asistencias. Sin embargo, la cosa no funciona.