Los Blazers siguen sobreviviendo como pueden sin su gran estrella. Damian Lillard se lesionó el 23 de diciembre. Desde entonces, Navidad en blanco, Fin de Año sin Baloncesto, inicio de 2017 en el dique seco. El base ya lleva 10 días de baja. En ese tiempo se ha perdido 4 partidos.
Lillard no ha jugado ante Raptors, Kings, Spurs y Timberwolves. De esos 4 partidos, Portland ha ganado 2. El último ante Minnesota con 43 puntos de C.J. McCollum. El escolta tiene que multiplicarse por la ausencia de su socio.
La lesión de Lillard tuvo lugar ante Spurs el 23 de diciembre. Se jugaba el cuarto final del partido. Se torció el tobillo izquierdo. El jugador intentó seguir jugando. En balde. No pudo.
El esguince le dejó en situación de día a día. Es decir, los médicos observan su evolución a diario para darle el alta o no. No se espera que la situación se prolongue mucho.
Mientras tanto, Blazers tiene que acostumbrarse a jugar sin él. Y es que no hay que olvidar que Lillard promedia 27 puntos y 6,2 asistencias en los 32 partidos que ha jugado.