Los Sixers fueron un muñeco de trapo en manos de Andrew Wiggins y Karl-Anthony Towns. Victoria de Minnesota por 110-86 con 60 puntos y 20 rebotes del dúo de jóvenes estelares, que firmó un par de dobles-dobles en una noche sin historia.
La serie conjunta en el tiro de campo estuvo en 26 canastas de 38 intentos, lo que da una idea de su dominio de la ofensiva.
Wiggins está pletórico. Ante Philadelphia se fue a 35 puntos y 10 rebotes con un 70% en el tiro de campo. Ha explotado de forma salvaje en los 3 últimos partidos, en los que promedia 37 puntos con un 58,5% en el tiro de campo lanzando 22 tiros por noche. Y su media en la temporada se ha disparado: 27,4 tantos con un 53% desde el triple. Va a más a partir de una confianza creciente.
Towns no le va a la zaga. Anoche, 25 puntos y 10 rebotes con 12 de 18 en el tiro dinámico. Y doble-doble de media en los 3 últimos partidos con 22,7 puntos y 10 rebotes. En la temporada está en 22,3 puntos y 8,9 capturas en los aros.
A pesar de todo ello, Minnesota sigue sin carburar, pues solo ha ganado 4 de los 11 partidos que ha jugado.
Ante Sixers fue fácil, con un 61-33 al descanso. El partido tuvo poca historia y el duelo de bases españoles entre Ricky Rubio y Sergio Rodríguez fue un fiasco.