Pocas veces la vida permite homenajear a figuras a las que se admira. La estrella de los Cavs, LeBron James, acaba de tener esa oportunidad. Seguidor incondicional del boxeador Muhammad Ali, el de Akron ha donado 2,5 millones de dólares para una exposición que el Museo Smithsonian de Historia y Cultura Afroamericana, de Washington, dedica estos días al tricampeón mundial de los pesos pesados.
“Muhammad Ali es algo así como una piedra angular en mi vida como deportista, por todo lo que representó no solo dentro del ring, como campeón, sino sobre todo fuera del cuadrilátero, por todo aquello que defendió, por su postura ante todo”, declaró James a USA Today con motivo de la muestra “Muhammad Ali: una fuerza para el cambio”.
La donación al museo washingtoniano es la suma del dinero aportado por el alero de Cleveland, su fundación benéfica (LeBron James Family Foundation) y su socio Maverick Carter, uniéndose así a las cantidades entregadas desde la inauguración del museo, en septiembre, por dos leyendas de la NBA, Michael Jordan (5 millones) y Magic Johnson (1).
Un repaso deportivo y vital
En la exposición pueden verse objetos personales del boxeador, como su casco protector o la bata que usaba en sus entrenamientos en el mítico 5th Street Gym, de Miami Beach, cuando aún era Cassius Clay, antes de ser bautizado como Muhammad Ali tras su conversión al islam.
La muestra refleja tanto sus logros deportivos como sus diferentes facetas dentro del activismo social.
El mito del boxeo mundial falleció a los 74 años, en junio pasado, justo entre los dos primeros partidos de las Finales NBA entre Cleveland y Golden State. Ya en aquel momento, LeBron reconoció que desde niño se sintió “atraído por él porque era un campeón, aunque solo conocía lo que había hecho dentro del ring” y que, al crecer, fue consciente de todo lo que representaba su figura más allá del deporte.
La viuda de Ali, Lonnie, quiso agradecer mediante un comunicado la “increíble generosidad” mostrada por LeBron. “Esta exposición permitirá a los niños que visiten el Smithsonian aprender más sobre el trabajo de Muhammad fuera del ring, sobre todo su trabajo humanitario y postura en justicia social para todo el mundo... Sé que si Muhammad estuviera vivo hoy estaría muy honrado”, agregó.