El 5 veces All-Star y actual entrenador asistente de Detroit Pistons Tim Hardaway ha evitado la cárcel en el caso que se seguía contra él por conducir bajo los efectos del alcohol en Michigan el pasado mes de abril. El exjugador tendrá que realizar servicios comunitarios.
Hardaway fue detenido el pasado 23 de abril cerca de su domicilio en Beverly Hills, una pedanía de la localidad de Southfield, un suburbio al norte de Detroit. Su arresto no trascendió a la prensa hasta el pasado mes de agosto.
La policía le dio el alto inicialmente por exceder la velocidad permitida y el jugador se negó a pasar un test de alcoholemia. Los agentes solicitaron entonces una orden para realizarle un análisis de sangre que arrojó unos niveles por encima del doble de lo permitido, un nivel que en Michigan endurece notablemente las penas a las que se puede enfrentar el infractor.
Hardaway, que jugó 13 temporadas en la NBA y tiene 50 años en la actualidad, se arriesgaba a una condena de hasta 6 meses de cárcel, pero, tras decidir no oponerse a los cargos, una juez de Southfield le ha condenado a 18 meses de libertad condicional y 10 días de servicios comunitarios. Además, deberá asistir a un curso de prevención dirigido a conductores que han sido cazados con una o varias copas de más.
También es seguro que la NBA le impondrá algún tipo de sanción tras su condena, probablemente un par de partidos de suspensión de empleo y sueldo, castigo impuesto en anteriores ocasiones en casos similares.