Estados Unidos ha terminado invicta la primera fase, pero se va de ella sin magia y sin autoridad. Tras 2 victorias contundentes ante las cenicientas de su grupo -China y Venezuela-, el equipo de Mike Krzyzewski solo pudo ganar por 10 a Australia, por 3 a Serbia y por 3 a Francia.
Última jornada y más de lo mismo. Estados Unidos defendiendo mal, sin ritmo competitivo y sin meter miedo a nadie. Francia se permitió el lujo de caer por 100-97 sin poner en juego a su base titular Tony Parker. Aunque esta vez el partido no estuvo tan tremendamente apretado como el de Serbia.
Klay Thompson fue el salvador del equipo. Hasta ahora venía haciendo un torneo muy pobre, pero esta vez sacó a relucir su mejor condición. Especialmente en el tercer cuarto, cuando anotó 5 triples. Terminó el de Warriors con 30 puntos y 7 triples. Estelar, sin duda.
EE.UU. acabó el cuarto dominando por 12 puntos (81-69) gracias a esa exhibición de Thompson, pero ni por esas fue capaz de cerrar el partido con holgura.
Además de Thompson, hay que destacar los 17 puntos de Kevin Durant con un 6 de 6 en el tiro de campo y los 10 tantos y 12 asistencias de Kyrie Irving.
No jugó Parker en Francia, pero sus bases sobresalieron. Nando de Colo firmó 18 puntos y 5 asistencias en 19 minutos y Thomas Heurtel añadió 18 puntos, 8 rebotes y 9 asistencias en una grandísima actuación en la que rozó el triple-doble. A ello se sumaron las buenas aportaciones de jugadores NBA como Nicolas Batum, Joffrey Lauvergne o Boris Diaw.
Victorias de Australia y Serbia
Los otros 2 partidos del grupo no tuvieron historia. Australia ganó por 25 puntos a Venezuela (81-56) y Serbia destrozó a China por 34 de diferencia (94-60).
Australia reservó a Patty Mills, solo puso en juego durante 8 minutos a Matthew Dellavedova y recuperó de su descanso a un buen Andrew Bogut. Chris Goulding, con 22 puntos, fue el máximo anotador de los Boomers.
Serbia, mientras, rompió el partido en el tercer cuarto con un parcial de 35-15. Bogdan Bogdanovic fue su mejor hombre con 19 puntos y 5 triples.