Drew Gooden y JaVale McGee se han quedado sin equipo. Al primero le ha despedido Washington Wizards y del segundo ha prescindido Dallas Mavericks. No habían rendido bien ninguno de los dos en la temporada recién terminada.
Gooden tiene ya 34 años y 14 temporadas en la NBA a sus espaldas. Fue elegido número 4 del draft de 2002 y no llegó a responder como se esperaba. Pero ha tenido un largo recorrido.
Llevaba ya 3 años en los Wizards. El primero resultó notable partiendo de la segunda unidad. Pero su rendimiento fue decreciendo con el tiempo. Y en la última temporada apenas jugó 30 partidos con números discretos. Su contrato para 2016-17, 3,5 millones de dólares, no estaba garantizado.
Lo de McGee es otro cantar. Hablamos de un jugador que tiene tantas cualidades físicas como mala cabeza. Y esto último ha pesado mucho en su carrera deportiva. El curso pasado apenas jugó 34 encuentros con Dallas promediando 5,1 puntos y 3,9 rebotes en 10,9 minutos.
A sus 28 años no levanta cabeza. Su contrato incluía un salario de 1,4 millones de dólares la próxima temporada, pero no estaba garantizado.