Ninguno de ellos había llegado en los 3 partidos anteriores a 20 puntos. Ni Stephen Curry ni Klay Thompson. Pues bien, en el cuarto sumaron 63. Curry, tremenda su actuación, se fue a 38 puntos y Thompson a 25. Los Splash Brothers ponen a los Warriors al borde del anillo.
Victoria de Golden State por 97-108 en Cleveland para colocarse 3-1 en las Finales. ¡Nunca un equipo ha remontado un 3-1 en unas Finales de la NBA! En 32 ocasiones una escuadra se ha puesto 3-1 y las 32 veces esa escuadra ganó el campeonato. Un dato demoledor para los Cavs, que perdieron su primer partido en casa en los presentes playoffs en el momento más inoportuno.
Cleveland acabó mal el partido. Desfondado físicamente. Con gestos de impotencia, como los que dispensó LeBron James a Stephen Curry en la recta final del choque. Sin capacidad ofensiva. Pero antes se había vivido por fin el único partido igualado de las Finales 2016. El mejor envite. Porque el encuentro tuvo momentos estelares que pasarán de la retina a la memoria.
Algunos mates fantásticos de LeBron James, dos pasadas de Kyrie Irving ante Curry en forma de tapón y de crossover, algunos triples maravillosos de un Curry ganador en estado de gracia, la brega en el rebote ofensivo de Tristan Thompson en el inicio, el poder físico de Andre Iguodala y Draymond Green como argamasa del triunfo, el canastón con el que Curry puso el 89-98 para prácticamente matar el partido, el rifirrafe entre Green y LeBron, también en la recta final...
Todo un equipo
Al final, victoria visitante con un 20-29 en el cuarto final. Con Curry haciendo 38 puntos, 5 rebotes, 6 asistencias y 7 triples. Con Thompson añadiendo 25 con 4 triples. Con las ayudas importantes como secundarios de Draymond Green, Andre Iguodala -tremendo en los momentos cruciales- y Harrison Barnes. Sin Leandro Barbosa en pista, pero con James McAdoo como sorpresa de Steve Kerr... En fin, todo un equipo campeón que busca doblar su éxito.
Los Warriors remontaron en la segunda parte en el aspecto reboteador, devolviendo con el rebote ofensivo el daño que les hizo en el primer cuarto Tristan Thompson (tremenda la intensidad de Anderson Varejao en lo poco que jugó).
Golden State solo perdió 8 balones en el encuentro y fue muy superior desde el triple: metió 17 con un 47% de acierto frente a los 6 con un 24% de Cleveland. Éste fue un elemento clave. El otro, la mejora defensiva de los californianos en la segunda parte. Crucial.
Cleveland muere agotado
Tras un partido muy igualado, Cleveland llegó desfondado al final del partido. Un triple de Harrison Barnes a 5:56 del final puso el 84-93 tras un parcial de 14-3 para Warriors, siendo el principio del fin del equipo local.
Gran final en lo físico de Golden State que hundió los partidazos de Kyrie Irving (34 puntos y 3 robos) y LeBron James (25 tantos, 13 rebotes y 9 asistencias, aunque otra vez muchas pérdidas: 7). Jugó nada menos que 46 minutos. Tristan Thompson y J.R. Smith fueron de más a menos y Kevin Love, que partió como suplente, fue el único jugador efectivo en la segunda unidad, aunque Tyronn Lue se olvidó de él en la recta decisiva.
Una recta final que no fue más que la reivindicación desde los libres de los Splash Brothers, que no fallaron. Curry y Thompson sumaban hasta ahora 28 puntos por partido. Hoy hicieron 63 y ganaron prácticamente el anillo. Lo de Curry, sublime. Metió 24 puntos en la segunda parte y fue el MVP que se esperaba, un MVP que hasta el cuarto partido no se dejó ver.