La relación del ex jugador de los Hawks Ivan Johnson con las ligas asiáticas es tormentosa como su carácter. Su último encontronazo con las autoridades disciplinarias le ha costado la expulsión de la liga filipina (PBA). Y no es la primera competición asiática de la que es expulsado.
Johnson, que había llegado a Filipinas hace escasas fechas y volvía al juego tras una sanción previa de 1 partido, fue expulsado tras recibir primero una técnica y serle señalada poco más tarde una falta flagrante.
Al jugador de los Tropang TNT no pareció gustarle su expulsión y decidió descargar su ira nada menos que contra el máximo dirigente de la PBA, Chito Narvasa.
La reacción de la liga ha sido imponerle una multa de 250.000 pesos filipinos (más de 13.000 dólares) y expulsarle de la competición por “dirigirse al Comisionado profiriendo obscenidades y mostrar una absoluta falta de respeto a la autoridad”, según rezaba el comunicado que anunciaba la decisión.
Un jugador con un carácter complicado
No es la primera vez que Johnson, de carácter complicado, es expulsado de una competición en el continente asiático. Ya en 2010, antes de su llegada a la NBA, la liga de Corea del Sur tomó una medida similar después de que el jugador le mostrara su dedo medio a uno de los árbitros, un gesto que no gustó nada.
Johnson, que jugó 2 temporadas con los Hawks entre 2011 y 2013, promediando 6,5 puntos y 3,9 rebotes, es un auténtico trotamundos que, además de por Corea del Sur y Filipinas, ha pasado por Puerto Rico, China y España.
Su paso por la península Ibérica fue fugaz, ya que firmó con el Guipuzkoa Basket el pasado septiembre y en octubre fue despedido por “problemas de adaptación”, según aseguró entonces Jaume Ponsarnau, técnico de los donostiarras.