Otra pachanga en el corazón de un All-Star. Al menos, el resultado final quedó apretado. Estados Unidos ganó 157-154 al Mundo en un encuentro sin defensas ni tensión que traspasó la fina barrera que separa el espectáculo de la astracanada. Zach Lavine fue elegido MVP.
El resultado final lo dice todo: 157-154 en un partido de 40 minutos. ¡Pero es que al descanso Estados Unidos ganaba 88-79 en una sucesión de mates y triples sin sentido! En el intermedio, los novatos y jugadores de segundo año presentes en la pista del Air Canada Centre de Toronto ya habían metido 44 triples.
Los equipos de Larry Drew y Ettore Messina jugaban a su antojo. No había defensas, no se paraba el juego porque no había faltas. Y la repetición del espectáculo de forma reiterada rompe la magia del espectáculo convirtiendo todo en algo grotesco, extremadamente pueril.
LaVine MVP, excelente Porzingis
Zach Lavine fue elegido MVP tras finalizar el choque con 30 puntos y 7 rebotes, pero se mostraba más excitado por lo que le espera hoy, que no es otra cosa que defender su título en el Concurso de Mates.
Junto a él, brillaron en Estados Unidos Jordan Clarkson (25 puntos), Devin Booker (23), D'Angelo Russell (22) y Karl-Anthony Towns (18). Ningún jugador disputó más de 24 minutos.
Al final del partido, el equipo lanzó 116 tiros de campo con un 56% de acierto, hizo un 19 de 46 desde el triple y cometió 5 faltas. Lo dicho, una broma.
En el equipo del Mundo, enormes 3 jugadores: Kristaps Porzingis, Emmanuel Mudiay y Andrew Wiggins. El letón se fue a 30 puntos con 5 de 8 desde el triple. El congoleño firmó otros 30 puntos con 10 asistencias y el jugador nativo de Toronto se fue a 29 tantos. Además, completo Mario Hezonja. El croata firmó 19 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias.
Por parte del Mundo, 111 lanzamientos de campo con un 60% de acierto para perder, 15 de 38 triples y 9 faltas.
Así fue el Rising Stars Challenge, partido entre Estados Unidos y el Mundo con jugadores novatos y de segundo año mezclados que patrocina BBVA.