La paciencia de Phil Jackson con respecto a la trayectoria de los Knicks ha llegado a su fin. El presidente de la franquicia ha anunciado hoy en un comunicado su decisión de destituir a Derek Fisher como entrenador del equipo tras los últimos malos resultados del equipo. Kurt Rambis ocupará su lugar de forma interina.
Fisher se marcha de los Knicks, a los que llegó en el verano de 2014 nada más retirarse como jugador, con un pobre récord de 40-96 (29% de victorias) tras una desastrosa primera temporada al frente del equipo y una segunda que empezó con mejores perspectivas, pero en la que el equipo se ha ido desinflando.
Las últimas 5 derrotas consecutivas de los neoyorquinos, que solo han ganado 1 de sus últimos 9 partidos y tienen un registro de 23-31, han terminado de sentenciar la primera experiencia en los banquillos del que fuera base de los Lakers.
Rambis se pone al frente
Sustituye a Fisher, en principio de forma interina, otro ex Laker, Rambis, que hasta ahora ejercía de segundo en el cuerpo técnico. Rambis tiene experiencia como entrenador jefe, estuvo 2 temporadas con poco éxito en Minnesota, y más aún como asistente.
Nacido en Indiana, Rambis tiene en su poder 8 anillos de la NBA, todos con los Lakers, 4 como jugador, cuando era el tipo más duro de los Lakers del ‘showtime’, y otros 4 como asistente o ejecutivo de la franquicia.
Será el 27º entrenador de la historia de los Knicks y el 5º en serlo tras haber sido elegido por la franquicia neoyorquina en el draft (lo fue en el puesto 58, 3ª ronda, del draft de 1980, aunque nunca jugó con ellos).
Ya se habla de otros 2 ex Lakers, Brian Shaw y Luke Walton, como candidatos para quedarse la plaza de entrenador jefe en propiedad si los Knicks emprenden la búsqueda de un nuevo técnico.