Jimmy Butler es humano. Su físico no es ilimitado. Anoche se comprobó. Y los datos son extremadamante claros. En 24 horas pasó de hacer la mejor anotación de su vida, 53 puntos antes los Sixers, a protagonizar su peor partido ofensivo del curso, 4 tantos frente a Mavericks.
Jugar 2 partidos seguidos habiendo anotado 53 puntos en el primero nubló el físico del portentoso jugador de Chicago.
Si la noche anterior se fue a 53 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias dando la victoria a los suyos, anoche apenas dio nada a Bulls, que perdió en casa ante Dallas. Sus estadísticas: 4 puntos en 36 minutos con 2 de 11 en el tiro de campo y 0 de 4 en triples. Acorde con un equipo que anotó el 36% de sus tiros con un 2 de 19 desde más allá del arco.
Dallas terminó ganando 77-83 con 21 puntos de un decisivo Dirk Nowitzki y 18 de Deron Williams. J.J. Barea sumó 9 en 20 minutos y Charlie Villanueva solo estuvo 3 minutos en pista.
Hundimiento tras el descanso
Los Bulls, mientras, pasaron del 46-36 de la primera parte a perder en la segunda metiendo solo 31 puntos. Cuestión de cansancio.
Chicago recuperó a Derrick Rose y Pau Gasol, que fueron sus mejores hombres al estar más descansados. El primero hizo 18 puntos y el segundo 17 más 8 rebotes. Pero perdió el equipo a Joakim Noah, que se dislocó el hombro que ya se había lesionado en diciembre. Tremenda la imagen del internacional francés recorriendo la pista gritando con el hombro fuera.