'Castigados'. No hay otra. Sam Mitchell no vio con buenos ojos la actuación de la columna vertebral de su cinco inicial y decidió prescindir de la misma. De este modo, Ricky Rubio, Karl-Anthony Towns y Andrew Wiggins no pisaron ni un segundo la cancha en el último y decisivo cuarto.
Sucedió ayer domingo en Phoenix. Rubio y Towns no jugaron los últimos 16 minutos y 37 segundos del partido. Tras ser sustituidos por Zach LaVine y Gorgui Dieng a 4:37 del final del tercer cuarto, ambos se tuvieron que conformar con ser meros espectadores del partido de ahí hasta el final.
Algo parecido le sucedió a Wiggins, cambiado por Andre Miller a 1:05 del final del tercer acto. No salió más. Permaneció inédito en los últimos 13 minutos y 5 segundos del partido.
Eso sí, con ellos en cancha el equipo no funcionó y sin ellos Minnesota remontó lo que pudo con una segunda unidad comandada por un encendido LaVine (28 puntos). De perder por 21 puntos a poco de acabar el tercer cuarto a acercarse a la igualada, aunque al final terminara ganando Phoenix Suns por 108-101.
A la conclusión, Towns disputó 18 minutos, Rubio 23 y Wiggins 27. El toque de atención fue claro.