Gregg Popovich no tiene fecha de caducidad como entrenador de San Antonio Spurs. El que es uno de los técnicos más laureados de la historia de la NBA seguirá entrenando en tierras texanas más allá de las retiradas de Tim Duncan y Manu Ginóbili.
Era de esperar. Y es que la decisión de Pop entra dentro de la lógica más aplastante. San Antonio pugnaba en julio por uno de los grandes atractivos del mercado estival, el texano LaMarcus Aldridge, y para hacerse con sus servicios Popovich tuvo que comprometerse a seguir en la banda. De no ser así, Aldridge hubiera elegido otra opción.
Así lo ha reconocido el técnico en una entrevista concedida a ESPN: "Al fichar a LaMarcus Aldridge este verano tuve que comprometerme". No lo dudó. Eso sí, es muy consciente de que la vida será diferente sin Duncan y Ginóbili.
De este modo, Popovich confirma en septiembre lo que ya se había apuntado como muy probable en el mes de julio.
Una carrera juntos
No hay que olvidar que Popovich empezó a entrenar a los Spurs en 1996 y que Duncan fue la apuesta del equipo en el draft de 1997, draft en el que le seleccionaron en el puesto número 1. Desde entonces, Popovich y Duncan han ganado juntos 5 anillos, mientras que Ginóbili se ha hecho con 4.
Ahora, solo resta una temporada o a lo sumo dos para que ambos jugadores abandonen la práctica deportiva. Y Popovich no tiene dudas: "Me sentiré muy raro cuando entre en una pista y no vea a ninguno de los dos. Les voy a echar mucho de menos".