40 largos años han tenido que esperar en Oakland para ver a su equipo de nuevo en unas Finales de la NBA tras levantar el título de campeón de la Conferencia Oeste. Fue en la temporada 1974-75 y aquel año, los Warriors se proclamaron campeones frente a Washington Bullets.
Al año siguiente, jugaron, y perdieron, la final de Conferencia, pero desde entonces, los Warriors ni siquiera habían llegado tan lejos. Un puñado de semifinales de conferencia, o lo que es lo mismo, segundas rondas de playoff, habían sido su máximo avance en todos estos años.
Ahora, de la mano del gran ídolo de la afición local y MVP de esta temporada, Stephen Curry, al equipo de Oakland le queda un solo paso para repetir el éxito de 1975 y el obstáculo, nada sencillo, a superar para lograrlo no será otro que los Cleveland Cavaliers de LeBron James. Lo podremos ver a partir del 4 de junio.
Una franquicia con mucha historia
Los Warriors son, junto a Knicks y Celtics, las únicas franquicias presentes en la competición desde sus orígenes, en 1946. Para ellos, será su quinta final de la NBA y la posibilidad de sumar su tercer título, tras el mencionado de 1974-75 y el logrado en 1955-56, cuando el equipo aún estaba en Filadelfia. Además, dentro de su extenso palmarés, la franquicia jugó 2 finales de la BAA, precursora de la NBA y logró un título, el primero de la historia de la liga en 1946-47.
En los presentes playoffs, Golden State se deshizo de Pelicans en la primera ronda por un claro 4-0, sufrió bastante más para imponerse 4-2 en semifinales de conferencia a los Grizzlies, tras ir perdiendo 1-2, y ha superado por 4-1 a los Rockets en una final de conferencia cuya clave estuvo en los dos primeros encuentros, partidos en los que los de Houston estuvieron muy cerca de recuperar el factor cancha, pero no lo lograron.