Brutal. No hay otra palabra para definir otra acción mágica de Stephen Curry. Y encima en el cara a cara con Chris Paul. Sucedió en el segundo cuarto del Clippers-Warriors que terminaron ganando los segundos.
Curry se va a la línea de fondo botando y allí hace una mágica acción de control de balón y movimiento de pies que rompe los tobillos de Paul y le deja sentado en el suelo. Además, Curry anota ante el grito de admiración de la afición local, que premia a Curry a pesar de tener a su ídolo por los suelos.
Tremenda jugada personal de Stephen Curry.