En este bloque de partidos nos ocupamos de tres soberanas palizas, unas más normales que otras. La más normal, desde luego, los 36 puntos de ventaja de Clippers sobre Sixers con Chris Paul sentando cátedra en el juego.
Menos normal fue el rapapolvo recibido por Miami en Houston (115-79), aunque tampoco increíble, con James Harden y Dwight Howard produciendo a lo grande. Y aún menos normal, verdaderamente anormal en realidad, la que se llevaron los Grizzlies en Denver (114-85) con Ty Lawson dirigiendo el correctivo y Marc Gasol metiendo 18 puntos en la sonora derrota.
Houston 115 Miami 79
Houston venía de un horrible partido en Nueva Orleans, de encajar una paliza inmisericorde tras ofrecer un juego impresentable. Pues bien, la recuperación resultó instantánea y Miami pagó los platos rotos a partir de un segundo y un tercer cuartos demoledores: ¡38-22 y 33-11 para un tremendo 71-33 en 24 minutos de juego!. A partir de esa demolición, Miami no existió.
Los locales corrieron cuanto quisieron, metieron 27 puntos al contraataque y demostraron que funcionan mejor con Josh Smith como sexto hombre que con el recién fichado como titular. El dominio de Harden (28 puntos en 28 minutos) y Howard (23 tantos y 13 rebotes en 26) resultó incontestable. Donatas Motiejunas fue titular y los refuerzos de nuevo cuño Josh Smith y Corey Brewer aportaron desde la segunda unidad. Trevor Ariza solo metió 2 puntos en 23 minutos pero empató su mejor marca NBA de robos de balón con 6.
El ataque de Miami Heat resultó patético. Sus máximos anotadores fueron Dwyane Wade y Chris Bosh, ambos con 15 puntos en discretas actuaciones.
Denver 114 Memphis 85
No fue el partido de Grizzlies, ni en la defensa, ni en el ataque. A los de Memphis se les atragantó el back-to-back y recibieron una soberana paliza totalmente inesperada. La ventaja local fue in crescendo. Sin prisa, pero sin pausa: +10 en el primer cuarto, +11 al descanso, +23 en el tercer cuarto y +29 al final.
El tercer cuarto resultó definitivo. El equipo de Colorado se fue en el marcador y los árbitros expulsaron al entrenador visitante, Dave Joerger. Y los Nuggets ganaron fácil con 25 puntos, 11 asistencias y 10 de 14 en el tiro para Ty Lawson, 23 tantos de Arron Afflalo y 13 con 13 rebotes de Kenneth Faried. Además, 11 puntos, 10 rebotes y 5 tapones de un intenso Jusuf Nurkic. Parece mentira que se fuera del partido el novato sin que los árbitros le pitaran una sola falta en 23 minutos.
En Memphis, demasiado solo Marc Gasol, autor de 18 puntos, 5 rebotes y 3 tapones en 27 minutos. Acabó frustrado. Mike Conley no funcionó y bien que lo notó su equipo. Y Jordan Adams aprovechó los minutos de la basura para lucirse.
L.A. Clippers 127 Philadelphia 91
Esta paliza sí que no puede sorprender a nadie. Los locales llegaron con 14 puntos de ventaja al inicio del cuarto cuarto para firmar un tremendo 39-17 en los últimos 12 minutos con Jordan Farmar luciendo palmito baloncestístico. Pero la gran estrella local fue Chris Paul, dominador de la situación con 24 puntos, 8 rebotes y 12 asistencias. Además, 17 puntos de J.J. Redick. Todos los jugadores de Clippers que jugaron, 12, fueron partícipes de la fiesta anotando puntos.
Los locales anotaron 30 puntos al contraataque, hicieron 15 triples, dieron 33 asistencias y solo perdieron 8 balones en su particular paseo triunfal.
No jugó Michael Carter-Williams en Sixers. El equipo perdió 21 balones que dieron lugar a 32 puntos del rival. Fue otro desastre del que solo se libraron Tony Wroten (27 puntos y 7 asistencias) y Robert Covington (23 tantos). Nerlens Noel capturó 12 rebotes.