Rajon Rondo está físicamente a un buen nivel después de los serios problemas físicos que atravesó en los últimos tiempos. El jugador de Kentucky se mueve en números parecidos a anteriores temporadas, pero entre toda la maraña estadística que describe el juego del baloncesto hay una que se está convirtiendo en una auténtica pesadilla para el base de Boston Celtics: los tiros libres.
El armador de Celtics promedia en el primer mes de temporada regular 9,3 puntos, 7,4 rebotes y 10,5 asistencias. Es decir, anota algo menos, rebotea algo más y pasa al nivel de siempre. Pero cuando uno llega a los tiros libres se lleva una gran impresión, y no precisamente positiva. ¡Rondo acumula un 9 de 30 desde la línea de personal, un 30% de acierto!.
Se da la circunstancia de que Rondo tira mejor de 3 (un 35,3%) que de 1 (un 30%). Parece imposible, pero así es.
La estrella de Celtics empezó la temporada haciendo un 0 de 4 en su debut ante Brooklyn y el 17 de noviembre llegó a protagonizar un 2 de 10 frente a Suns.
Asignatura pendiente
Los tiros libres siempre fueron una asignatura pendiente para Rondo. En los 2 cursos universitarios que pasó en su Kentucky natal, el jugador acertó solo con el 57,7% de sus tiros desde la línea de personal.
Durante toda su etapa NBA Rondo se ha movido entre el 60 y el 65% en los libres. Su peor marca en toda una temporada, un 56,8%. Por eso, su desastroso 30% tiene que llamar la atención a todos. Lo suyo es una crisis seria.