Malas noticias para Ricky Rubio y Minnesota. La resonancia magnética a la que se ha sometido hoy el base de los Wolves ha confirmado la gravedad del esguince de tobillo que sufrió anoche en el segundo cuarto del Magic-Timberwolves.
Antes, unas pruebas de rayos X habían descartado cualquier problema óseo, pero ello no es óbice para considerar que el esguince del jugador fue realmente serio, tal y como demuestran las imágenes de la lesión, el hecho de que tuviera que ser ayudado para abandonar la pista y la circunstancia de que se fuera del pabellón andando con muletas.
Ricky había brillado en el primer cuarto y antes de empezar el partido promediaba 10,6 puntos y 11 asistencias ofreciendo un muy buen nivel de juego días después de firmar una millonaria extensión de contrato cifrada en algo más de 55 millones de dólares por 4 temporadas.
Se trata, sin duda, de un serio contratiempo para el equipo de Flip Saunders, que ahora tendrá que confiar como base titular en el veterano Mo Williams.