Milwaukee Bucks está inmerso en una tarea ciclópea en apariencia: jugar con Giannis Antetokounmpo como base. El jovencísmo jugador griego tiene un enorme talento físico y técnico, pero convertirse en base con 2,11 de altura no es fácil.
El nuevo técnico de los Bucks, Jason Kidd, hizo anoche ante Cleveland la primera prueba como base de Antetokounmpo y se puede afirmar que constituyó una experiencia fallida.
Al jugador de segundo año le costó seguir en defensa a jugadores mucho más bajos que él como Matthew Dellavedova o, esporádicamente, Dion Waiters, y no tuvo claridad a la hora de construir el juego. Llevó a su defensor al poste bajo por primera vez cuando casi se habían cumplido 5 minutos de juego y un 2 contra 1 arruinó su movimiento. No estuvo mal en esos primeros 5 minutos, pero ya se adivinaron sus carencias.
Luego, en el segundo cuarto y el inicio del tercero, se cargó de faltas. Finalizó la primera parte sin anotar y a la conclusión del partido aportó 4 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias a los Bucks en la derrota. Cometió 5 faltas en 23 minutos y falló sus 5 tiros de campo.
Se puede decir que su primera experiencia como base NBA resultó insatisfactoria. Habrá que esperar. El reto promete.