La conversación privada entre Donald Sterling, propietario de los Clippers, y su actual pareja, que ha trascendido a lo público a partir de una grabación, no deja de provocar reacciones por su contenido racista. Una de ellas es que hasta el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha reprochado a Sterling sus comentarios racistas; otra podría ser que una leyenda de la NBA, Magic Johnson, se hiciera con la franquicia angelina.
El recorrido de Sterling en los Clippers no parece que pueda estirarse mucho. Cabe recordar que Sterling tiene 80 años y es el propietario actual que más tiempo lleva al frente de un equipo de la NBA desde que en febrero del año pasado falleciera Jerry Buss, dueño de Lakers. Sterling se hizo con los Clippers en 1981. Pero el actual nivel de presión no parece que vaya a dejar muchas opciones para que siga como si nada al frente de la franquicia.
En ese complicado escenario, todos buscan soluciones. Entre otros, la propia NBA. Adam Silver no está teniendo un fácil estreno como comisionado y, según Adrian Wojnarowski, de Yahoo! Sports, vería con buenos ojos la llegada de Magic Johnson a los Clippers ocupando el puesto de Sterling. Sería, dice Woj, la mejor de las posibles soluciones para la NBA.
Lo cierto es que los comentarios racistas de Sterling no han dejado a nadie indiferente, por mucho que era bien conocida la naturaleza racista del propietario de los Clippers. Hasta sus propios jugadores están en pie de guerra.
A río revuelto, ganancia de pescadores
En este escenario convulso, ya se sabe: a río revuelto, ganancia de pescadores. Y entre esos pescadores, el que parece tener la caña más larga y estar en el mejor puesto de pesca es Magic Johnson.
Johnson ya posee un equipo profesional de primer nivel en Los Ángeles. Se trata de los Dodgers, franquicia de la MLB (béisbol) que posee con Mark Walter a través de la empresa Guggenheim Partners.
A nadie se le escapa el deseo continuado de Johnson de adquirir un equipo de la NBA. Lo intentó por todos los medios con sus adorados Lakers, pero fue imposible ante la negativa de la familia Buss.
Por eso, ahora se presenta una gran oportunidad ante la posible salida de Sterling. Y la NBA sería feliz con un escenario en el que Magic fuera el dueño del equipo trabajando mano a mano con Doc Rivers, el actual entrenador de los Clippers, cuyo malestar con Sterling es también evidente.
Magic Johnson, mientras, ha sido uno de los más beligerantes con el dueño del equipo angelino: "Sterling ya no puede seguir como dueño... se requiere un castigo ejemplar", ha dicho. Aunque ahora sabemos que Magic es parte interesada, que es uno de los que más podrían ganar con la marcha de Sterling.