Se cumplieron las previsiones. Los Knicks han despedido a su entrenador, Mike Woodson, y con él cae todo su cuerpo técnico, según ha anunciado el nuevo presidente del equipo, Phil Jackson.
Se trata de la crónica de una destitución anunciada. Estaba claro que el equipo había fracasado rotundamente en la temporada y que Jackson apostaba por un cambio radical consistente en otros sistemas de juego y técnicos de confianza bajo su cobijo.
Woodson, de 56 años, había llegado en agosto de 2011 a los Knicks como asistente de Mike D'Antoni y en marzo de 2012 pasó a ser entrenador interino tras el despido de D'Antoni, una interinidad que dejó de existir en mayo cuando se convirtió en entrenador jefe.
Éxito y fracaso
Desde entonces, vivió las dos caras de la moneda. La temporada 2012-2013 fue tremendamente positiva con 54 victorias y 28 derrotras y éxito en primera ronda de playoffs después de 13 años de decepciones en New York.
Sin embargo, la presente campaña supuso un más que serio retroceso: 37 victorias sin llegar a la postemporada. Un batacazo inesperado que le ha costado el puesto.
Woodson, que antes entrenó durante 6 años a Atlanta Hawks, se queda sin equipo, como lo hace todo su cuerpo técnico, un cuerpo técnico formado por Jim Todd, Darrell Walker, Herb Williams y el preparador físico Roger Hinds.
Ahora, una de las franquicias más atractivas de la NBA busca entrenador. Y candidatos no faltan.