El veterano pívot de la NBA Jason Collins ha llegado a un acuerdo con Brooklyn Nets para incorporarse al equipo con un contrato de 10 días. Un fichaje que podría ser otro cualquiera en la liga, pero que hace historia tras haber declarado públicamente el jugador su homosexualidad.
Collins se convierte así en el primer jugador en activo abiertamente gay en la historia de las grandes ligas profesionales de Estados Unidos y uno de los escasos casos de deportista profesional en activo en el mundo que no oculta su condición sexual.
El pívot, de 35 años, decidió dejar de esconder sus preferencias sexuales en abril del año pasado, poco después de terminar la temporada regular militando en las filas de los Wizards. Lo hizo en una entrevista concedida al periodista Franz Lidz en Sports Illustrated. Un paso valiente que levantó no poco revuelo en el mundo de la NBA que, al menos en público, mostró de forma abrumadoramente mayoritaria su apoyo al jugador.
Sin embargo, desde entonces, Collins estaba sin equipo, tras no apostar nadie por él este verano. En cualquier caso, esa falta de ofertas cabe achacarla más a razones puramente deportivas ya que el jugador, tras 12 temporadas en la NBA, tampoco había tenido mucho peso en sus equipos a lo largo de las últimas temporadas.
Una decisión estrictamente deportiva
Collins aseguró desde el principio que no quería que su ‘nueva situación’ influyera ni para bien ni para mal en los posibles equipos interesados en él y que esperaba que cualquier oferta que pudiera recibir estuviera basada única y exclusivamente en criterios deportivos.
En eso mismo ha insistido hoy el general manager de los Nets, Billy King, al dar a conocer su contratación. “La decisión de firmar a Jason ha sido una decisión deportiva. Necesitábamos aumentar la profundidad de nuestro juego interior y con su experiencia y envergadura, sentíamos que era la mejor opción para un contrato de 10 días”, ha asegurado King.
Lo cierto es que, con Brook Lopez lesionado para toda la temporada y tras el traspaso de Reggie Evans a los Kings, el juego interior de los Nets había quedado muy debilitado y la presencia de Collins permitirá, en principio, paliar esas carencias.
Collins llevará, como ya lo hiciera en Boston y Washington, sus 2 últimos equipos, el número 98 en honor de Matthew Sheppard, estudiante de la Universidad de Wyoming que fue asesinado en 1998 por motivos homófobos.
Habrá que ver si tiene continuidad en los Nets o no, pero, por de pronto, el breve contrato de 10 días que ha firmado hoy ha hecho historia y supone un paso importante a la hora de normalizar la presencia en el deporte profesional de hombres y mujeres independientemente de sus preferencias sexuales y sin que tengan que esconder las mismas.