Que LeBron James es uno de los jugadores más difíciles de defender de la NBA es de sobra conocido y la estrella de los Heat volvió a demostrarlo ayer, anotando un difícil tiro desde una posición en la que cualquier otro ni siquiera lo habría intentado.
La defensa de los Spurs había hecho bien su trabajo en la jugada y Boris Diaw tenía arrinconado en una esquina, pegado a la línea de fondo, a un James que parecía haberse quedado sin opciones. Sin embargo, el alero de Miami no dudó en levantarse, ante la sorpresa incluso de su propio defensor, y ejecutar un complicado y muy arqueado tiro para evitar la tabla que entró limpiamente en la canasta rival.
La complicada canasta anotada por LeBron James ante Spurs.