Victorias muy cómodas en casa de Houston Rockets sobre Golden State Warrios y New York Knicks ante Orlando Magic. La texana fraguada en un tremendo primer cuarto y la neoyorquina concebida a partir de una fabulosa segunda parte.
Se trata de victorias muy distintas. Mientras que Houston es un equipo muy sólido en el Toyota Center, New York llevaba sin ganar en el Madison Square Garden desde el partido inaugural de la temporada, allá por el 30 de octubre. Los de Mike Woodson habían acumulado 7 derrotas consecutivas como locales.
Además, Phoenix venció a Toronto y sigue en su buena línea de resultados. Los suplentes Markieff Morris y Amir Johnson fueron los mejores de cada bando.
Houston 105 Golden State 83
Se esperaba una gran competencia en el Toyota Center, pero no la hubo. No la hubo porque los locales se sacaron de la chistera un espectacular primer cuarto en el que endosaron un 31-12 a su rival para acabar con el partido por la vía de urgencia.
Ese primer cuarto fue coto privado de los locales, con el jovencito Terrence Jones en 11 puntos y el abrumador Dwight Howard ejerciendo una poderosa tiranía en la pintura con 9 puntos y 9 rebotes. Fueron 12 minutos a los que a la consabida ofensiva brillante del equipo de Kevin McHale se unió una poco habitual intensidad defensiva, una intensidad que maniató por completo al ataque californiano.
El segundo cuarto tampoco fue un alivio para Golden State. Es cierto que los locales bajaron su imposible ritmo inicial, pero no cedieron ni un ápice en el marcador, llegando a tener 28 puntos de ventaja tras un triple de James Harden cerca del descanso. En el intermedio, un esclarecedor 61-37 con los Warriors en un 27% en el tiro de campo y habiendo anotado sólo 1 triple, un desastre para un equipo con excelentes lanzadores.
La segunda parte ya tuvo poca historia. Ganaron los Rockets, que suman un 14-7 y muestran una gran solidez en casa. Lo hicieron con 34 puntos de un James Harden que venía de hacer un partido horrible en su compromiso anterior. Anduvo esta vez fino en el tiro y completo en su juego. Además, 22 puntos y 18 rebotes de Howard con 12 de 20 desde los tiros libres y 16 tantos, 10 rebotes y 3 tapones de Terrence Jones. El dominicano Francisco García no anotó en 18 minutos tras fallar sus 4 lanzamientos, pero hizo 6 rebotes y puso 4 tapones.
Los Warriors murieron a manos de sus propias armas. Porque el rival les derrotó a base de juego rápido, canastas fáciles y control de la situación. Todo ello en un partido con bastantes faltas y muchas interrupciones para ir a los libres. Golden State fracasó desde el triple con un 2 de 16, perdió 22 balones, tuvo un gris David Lee y un horrible Klay Thompson. Stephen Curry sumó 22 puntos, 11 sin fallos desde los libres, pero perdió 8 balones. Y Harrison Barnes ofreció 14 tantos, 7 rebotes y 4 robos.
New York 121 Orlando 83
La afición de los Knicks por fin empieza a atisbar algunas luces al final del túnel. O eso parece. Es verdad que en sus 2 últimos partidos se ha enfrentado a unos Nets en plena crisis, casi en descomposición, y unos Magic que no son gran cosa. Pero también es cierto que lo que genera confianza es el modo en el que los Knicks han resuelto ambos enfrentamientos. ¡2 victorias consecutivas por 30 y 38 puntos!.
Estos 2 triunfos han tenido un par de puntos comunes. El increíble acierto de los Knicks desde más allá del arco, 16 y 17 triples convertidos, y la cesión de protagonismo ofensivo de Carmelo Anthony, que ha seguido siendo el líder, pero a lo LeBron, tirando poco y siendo muy efectivo. Melo sólo lanzó 12 veces ante Nets y 10 ante Magic, ¡pero hizo un 14 de 22 en el tiro!.
Otro aspecto que agradeció la grada del Madison Square Garden obedece a algo tan simple como ver ganar a su equipo, algo que no hacía desde el 30 de octubre, es decir, desde el partido inaugural. En noviembre, los Knicks perdieron todos sus partidos como locales y hasta anoche acumulaban ya 7 derrotas consecutivas en casa.
Vista la primera parte (59-54) tampoco había demasiados motivos para el optimismo. Pero es que la segunda parte de los Knicks fue brutal: ¡62-29 tras parciales de 30-15 en el tercer cuarto y 32-14 en el último!. Casi nada.
A su tremendo acierto desde el triple (17 de 34), su seguridad en el rebote y su control del partido, unieron un aspecto que hizo posible todos los anteriores: jugaron en colectivo. Todos los jugadores que saltaron a la pista anotaron y 7 hicieron 10 o más puntos. Anthony lideró al grupo con 20 puntos, 11 rebotes y un 60% en el tiro de campo lanzando bien poco.
Además, 17 tantos y 8 rebotes de Andrea Bargnani y gran acierto de la segunda unidad, que firmó 57 puntos bajo el liderazgo de J.R. Smith -17 puntos- y el novato Tim Hardaway Jr. -15-. Cada uno de ellos, Smith y Hardaway, hizo 5 triples. Menudo bombardeo. A ello se añadió la mejora de Metta World Peace. De este modo, no tuvo importancia la baja de Amar'e Stoudemire. El argentino Pablo Prigioni se unió a la fiesta con sus 3 puntos, 6 asistencias y 3 robos en 15 minutos. Lanzó 1 triple y lo metió. Fue fantástico ver el matazo que hizo Iman Shumpert, pero mucho más ver cómo los Knicks empiezan a jugar de forma coral.
En Orlando, 20 puntos de Arron Afflalo, 17 con 9 rebotes del novato Victor Oladipo y algunas cosas de Jameer Nelson, aunque fuera superado por Raymond Felton. Mal Glen Davis y se nota la ausencia de Nikola Vucevic.
Phoenix 106 Toronto 97
Phoenix no está fallando en este tipo de partidos. Tampoco lo hizo anoche. Y ya está con un 11-9 y un 6-3 en el US Airways Center.
El equipo local dominó el rebote (53-36 con 18 capturas en ataque) y tuvo a un buen grupo en su segunda unidad, una suplencia que anotó 47 puntos con un sobresaliente Markieff Morris a la cabeza: 25 puntos, 11 rebotes y 11 de 14 en el tiro de campo. Además, los titulares P.J. Tucker y Eric Bledsoe aportaron 18 puntos y 13 rebotes (récord reboteador de Tucker) y 16 tantos y 7 pases de canasta.
Todo ello en un encuentro que los Suns controlaron fantásticamente bien en la recta final. Lo más que apretaron los canadienses fue al ponerse 97-91 con una canasta de Amir Johnson a menos de 3 minutos del final, pero no pasaron de ahí. Un triple de Bledsoe acalló la posible rebelión visitante.
Fue precisamente otro suplente, el citado Amir Johnson, el mejor de Raptors con 22 puntos, 7 rebotes y 3 tapones. Kyle Lowry firmó 21 tantos y 7 asistencias, Rudy Gay añadió 17 y 10 rebotes y Jonas Valanciunas acabó con un corto doble doble. La peor noticia para Toronto, la pérdida en el primer cuarto del intenso Tyler Hansbrough por un problema en un hombro.