Equipar a un jugador novato con lo que dio de sí como novato el mítico Oscar Robertson son palabras mayores, aunque por ahora no lo parecen para el joven Michael Carter-Williams. Y es que el jugador de Philadelphia 76ers se ha equiparado a Robertson, míster triple-doble. Se trata de los dos únicos jugadores en la historia de la NBA que han conseguido al menos 130 puntos y 50 asistencias en sus 7 primeros partidos como profesionales.
Carter-Williams ha sumado en sus 7 primeras presencias en la NBA 131 puntos y 57 asistencias, fue nombrado Jugador de la Semana en el Este y promedia 18,7 puntos, 8,1 asistencias, 5,9 rebotes y 3,1 robos, además de meter el 41,7% de sus tiros triples. Números estelares que le llevan camino de hacer lo que hizo Robertson en su temporada iniciática, ganar el galardón de Novato del Año.
El base de Sixers, que mide 1,98 y se formó en Syracuse, está dando continuidad a su extraordinario partido de debut, que le enfrentó a Miami Heat. Y en lo que va de temporada promedia 21,3 puntos de eficiencia, siendo el mejor novato con claridad.