El sueño NBA de Jordan Henríquez ha resultado efímero. El internacional panameño nacido en Nueva York se ha quedado fuera de la plantilla de Houston Rockets a las primeras de cambio, sin tan siquiera poder vestir la camiseta del equipo en un partido amistoso de pretemporada.
Henríquez, cuyos padres son panameños, fue cortado ayer viernes por el equipo, que afronta hoy sábado su primer encuentro de preparación, según informa el Houston Chronicle.
El jugador había firmado un contrato plurianual este verano con los Rockets valorado en más de 2,2 millones de dólares por 3 temporadas. Pero de esos 2,2 millones de dólares no había ni uno solo que estuviera garantizado, por lo que su despido no le cuesta nada a Houston.
El que fuera pívot de Kansas State había tenido protagonismo estos días en los entrenamientos debido a las bajas de Marcus Camby y Greg Smith. Por ello, le tocó trabajar codo a codo con Dwight Howard, que también se perdió un día, y ocuparse de su marca en los partidillos de las prácticas. Toda una experiencia. La lástima es que no haya podido seguir los pasos de Gary Forbes, último panameño en jugar partidos oficiales de la NBA.
Una vez todos los hombres altos estuvieron recuperados, Henríquez no parecía tener sitio alguno en la plantilla, que también cuenta, por ejemplo, con Omer Asik. Y así ha sido. El equipo le ha cortado agradeciéndole su trabajo durante estos días y el jugador se ha ido con algunas experiencias muy positivas en sus alforjas. Lo ha dicho el propio Jordan Henríquez, que ha asegurado en su marcha que el de estos días ha sido un muy buen aprendizaje al lado de grandes jugadores y a las órdenes de Kevin McHale.
A sus 24 años, el internacional panameño seguirá buscando equipo tras no ser drafteado en junio. Y si no es en la NBA, tendrá que ser en otra liga.