La tan rumoreada posible amnistía del contrato de Pau Gasol en los Lakers parece haberse convertido de forma definitiva en una opción absolutamente descartada por la franquicia. Y es que, tras la salida de Dwight Howard del equipo, el pívot español resulta ahora indispensable.
Gasol ha quedado como única referencia interior de un equipo que apenas tiene posibilidades de reforzarse dada su estructura salarial y la limitación que ha entrado en vigor este año respecto a la adquisición de jugadores en acuerdos de ‘firma y traspaso’ por parte de los equipos que pagan la tasa de lujo, como los Lakers. Un tipo de acuerdo que sirvió, por ejemplo, para que los californianos se hicieran el año pasado con Steve Nash, algo que no podrían hacer ahora.
Lo cierto es que con la marcha de Howard y con Kobe Bryant lesionado, un Gasol a buen nivel es más necesario que nunca para los Lakers, lo que unido a que, sin Howard, la expectativa de sufrir graves penalizaciones salariales disminuye notablemente, haría que amnistiar el contrato del catalán se convirtiera en una maniobra muy poco hábil.
De ahí que desde Los Ángeles lleguen informaciones hablando del descarte definitivo de la amnistía como opción en el caso de Gasol –una opción que en todo caso nunca ha sido la preferida en la franquicia-, pero no así en el de otros jugadores, como Metta World Peace.
Sin Howard sobre la pista, Pau puede ocupar ahora el puesto de 5, un lugar en el que se siente más cómodo a estas alturas de su carrera y en el que se acomodaría mucho mejor dentro de un sistema como el de Mike D’Antoni, lo que debería ayudar a que su rendimiento subiera, especialmente si el verano le sirve para conseguir una plena recuperación en el plano físico.
Una vez Howard fuera del equipo, el plan B de los Lakers parece que pasa por no ser demasiado activos este verano y plantear la próxima temporada como de transición, rellenando la plantilla con contratos de corta duración. Ahora mismo, sólo Steve Nash tiene contrato más allá del próximo verano, lo que podría permitir a los Lakers rearmar completamente el equipo pasada esta temporada.
Los Lakers podrían disponer de un masivo espacio salarial el próximo mes de julio con el que hacerse con al menos 2 agentes libres del máximo nivel al tiempo que podrían renovar, con sensibles recortes respecto a sus actuales salarios, tanto a Kobe como a Pau. Un escenario ideal para que los californianos volvieran a tener un equipo capaz de luchar por el anillo durante unos cuantos años.
Desaprovechar ese escenario, si bien es cierto que el próximo verano se prevé más escaso de estrellas de primer nivel que el actual, podría convertirse en un grave error por parte de la directiva de los Lakers, aunque plantearlo suponga asumir que, tal vez, el equipo no sea competitivo a lo largo de la próxima temporada, algo complicado de llevar en una franquicia como la californiana.