Las negociaciones entre Clippers y Celtics para que Glenn ‘Doc’ Rivers acabe como entrenador de los californianos continúan convertidas estos días en una serpiente veraniega, con continuas informaciones que tan pronto acaban con ellas como les vuelven a dar vida.
Para contribuir a la ceremonia de la confusión en que se ha convertido todo el asunto, los Celtics convocaron ayer una rueda de prensa en la que iban a estar presentes el general manager del equipo, Danny Ainge, y el propio Rivers. Una comparecencia que desconvocaron horas más tarde y volvieron a convocar después, aunque ya para el próximo lunes.
Este aplazamiento ha dado lugar a diferentes interpretaciones en la prensa de Boston y la de Los Ángeles. La primera habla de que el acuerdo está “muerto” y que la posposición de la rueda de prensa para el próximo lunes se debe a que Rivers aún está meditando si seguirá en los Celtics o decidirá alejarse de los banquillos por un tiempo.
En cambio, en Los Ángeles atribuyen los cambios en la convocatoria a una reactivación de las conversaciones tras una nueva oferta presentada por los Clippers, que habrían ofrecido una elección de segunda ronda de draft a cambio de la liberación de Rivers. Una oferta que parece, en todo caso, lejos de las pretensiones de Ainge, que pide una primera ronda del draft de 2014, consciente del talento potencial que parece que traerá consigo la próxima añada, según todas las previsiones.
Posible veto de la liga
Por si fuera poco el lío de idas y venidas que están trayendo consigo estas conversaciones, la NBA ha intervenido para complicar aún más la madeja. La liga, a través de David Stern, ha dejado claro que vincular el posible traspaso de Kevin Garnett con la operación para liberar a Rivers de su contrato, como se venía haciendo estos días, vulnera el actual convenio y por lo tanto, no recibiría el necesario visto bueno de las autoridades de la liga.
Stern, además, dejó claro que la liga ya había comunicado su posición a ambos equipos al respecto. De ahí que en las últimas horas se haya notado un sensible cambio en las informaciones que se filtran a los medios, unas informaciones en las que, aparentemente, la salida de Rivers de los Celtics no aparece ya ligada a ninguna otra operación de intercambio.
Es de esperar que el próximo lunes, si Ainge y Rivers finalmente comparecen, se sepa algo más cierto sobre cómo están las cosas, aunque, tal y como se están desarrollando los acontecimientos, tampoco sería de extrañar que hubiera una nueva vuelta de tuerca y la incertidumbre perdurara. Lo cierto es que sólo el anuncio de la contratación de otro entrenador que no sea Doc Rivers por parte de los Clippers parece que será capaz de poner fin al serial en que andan inmersas ambas franquicias.