Como cabía esperar, Roy Hibbert ha sido multado. Ya advirtió el comisionado de la NBA, David Stern, de que el pívot de Indiana no se podía ir de rositas tras su incendiaria rueda de prensa una vez acabado el último Indiana-Miami. Y sus declaraciones no le han salido gratis.
La NBA ha multado a Hibbert con 75.000 dólares por utilizar en su última rueda de prensa "un lenguaje inapropiado y vulgar". Lo más penado ha sido su expresión homófoba cuando contestaba a una pregunta relativa al trabajo defensivo sobre LeBron James. Ese "no homo" ha resultado muy polémico. Se trata de una expresión inadecuada que no ha sentado nada bien en la comunidad gay, como tampoco ha caído bien en la propia liga, que cada vez se esfuerza más por cuidar este tipo de aspectos.
Además, Hibbert llamó "hijos de puta" a los periodistas cuando se le preguntó por su posición retrasada en el premio de Defensor del Año. El jugador recriminó a la prensa el que no se hubiera ocupado en toda la temporada de Pacers. En ese sentido, a lo mejor no le faltaba razón.
El caso es que la rueda de prensa se retransmitió por televisión a toda la nación, lo que agravó la mala imagen ofrecida. De nada han servido las disculpas ofrecidas ayer por el propio jugador, que ya sabía (y aceptaba) que iba a ser multado, tal y como ha sucedido.