El ala-pívot de los Nets Andray Blatche tiene un largo historial de amistades peligrosas y problemas con la justicia. El último, la supuesta agresión sexual en la que se ha visto involucrado. Las declaraciones de la víctima no le dejan en buen lugar, pero él dice no sentirse preocupado.
“No estoy preocupado en absoluto, porque cuando se sepa la verdad, todo el mundo sabrá lo que pasó", aseguró el jugador a la prensa este jueves. “Todos vosotros vais a oír la verdad tarde o temprano… Cuando pase el tiempo y pueda hablar de ello, todos os daréis cuenta de que no es lo que pensáis”, insistía Blatche.
Sin embargo, las declaraciones de la víctima de la supuesta agresión sexual no parecen dejar en buen lugar al jugador, pese a que, como ya afirmó la policía, ha dejado claro que, en principio, no participó de forma directa en la agresión, que se produjo en la suite que ocupaba el jugador de los Nets en el hotel Four Seasons de Filadelfia la noche previa al encuentro que su equipo debía disputar con los Sixers.
La mujer asegura que Blatche no la agredió, pero que “fue consciente en todo momento” de lo que estaba ocurriendo. Según ella, fue primero agredida por uno de los hombres en uno de los dormitorios de la suite mientras el jugador y otro de sus acompañantes observaban desde la puerta. Poco después fue agredida por un segundo hombre y más tarde, Blatche entró en la habitación, aunque no la agredió.
No se sabe si se presentarán cargos
La policía parece descartar que los sospechosos utilizasen algún tipo de droga para poder abusar de la víctima, hipótesis que habían manejado en un principio, a la que, al parecer, Blatche y sus acompañantes habrían conocido a lo largo de la noche en un club de striptease. También han venido a reconocer que podría resultar difícil presentar cargos dado que la víctima podría no ser una buena testigo puesto que “estaba muy borracha”.
A pesar de todo lo ocurrido Blatche ha asegurado, a preguntas de la prensa, que no cree que deba reconsiderar sus amistades y que tampoco está preocupado porque este asunto pueda dañar su reputación.
En cualquier caso, su reputación no es precisamente buena y desde sus inicios en la NBA se ha visto metido en más de un problema, incluidos varios arrestos policiales. En el mejor de los casos, suponiendo que finalmente no se presenten cargos contra él, estar de fiesta a las 4 de la mañana la noche previa a un partido, tampoco va ayudar a mejorarla.