Tras casi 2 meses de baja, Amare Stoudemire ha recibido el alta médica y mañana martes afrontará su primer entrenamiento de la temporada, que en principio no será con los Knicks, sino con los Erie BayHawks, conjunto de la Liga de Desarrollo de la NBA afiliado al equipo neoyorquino.
El ala-pívot llevaba en el dique seco desde el pasado 21 de octubre cuando se dañó la rodilla izquierda.
Por ello, Stoudemire aún no ha debutado en la temporada. Un debut que podría llegar en una fecha muy señalada, el Día de Navidad, y ante un rival también muy señalado, los Lakers.
La baja de Stoudemire tiene su origen en un fuerte golpe en la rodilla izquierda, la misma que se lesionó gravemente en 2005 cuando militaba en Phoenix Suns.
Por eso, el equipo médico de los Knicks ha sido muy cauto con el jugador y no le ha dado el alta médica hasta que no ha estado muy seguro de la perfecta recuperación de la rodilla.
Además, el equipo no ha necesitado mucho de sus servicios, dado el extraordinario nivel ofrecido hasta ahora por la escuadra que dirige Mike Woodson. Y es que no hay que olvidar que los Knicks lideran con comodidad la Conferencia Este con un balance de 18-5, o lo que es lo mismo, con un 78,3% de victorias que sólo supera en la NBA un equipo, Oklahoma City Thunder. Los neoyorquinos, además, siguen sin perder en el Madison, donde presentan un inmaculado 10-0.
Con esa hoja de servicios colectiva, no ha habido prisas por reincorporar a Stoudemire, lo que ha permitido eliminar cualquier tipo de riesgo.