El partido estelar de la jornada se vivió en el Staples Center entre Lakers y Spurs y acabó con victoria texana gracias a un triple de Danny Green y una gran defensa final texana que obligó a que Pau Gasol tuviera que lanzar de 3 cuando expiraba el encuentro.
Gasol falló el triple, pero no le quedó más remedio que tirarlo –no fue mal dirigido-. La defensa texana cerró todas las puertas a la estragegia diseñada por los angelinos en el tiempo muerto final. Los Spurs suman ya un 7-1 por el 3-5 que acumula Lakers.
Además, los Knicks doblegaron a Orlando en Florida y suman ya un 5-0, algo que no les ocurría desde hace casi 20 años. Los de Mike Woodson viven un momento dulce. Pablo Prigioni jugó 7 minutos y no lo hizo mal. En Orlando el boricua Moe Harkless, novato, disfrutó de su mejor noche NBA. Susto monumental por el accidente sufrido entre cuartos por una animadora, que tuvo que ser trasladada a un hospital.
Lejos de Florida, en California, Portland ganó a Sacramento con un gran Damian Lillard. El español Víctor Claver regresó a la convocatoria, pero solo jugó 2 minutos intrascendentes. Francisco García no fue de la partida.
L.A. Lakers 82 San Antonio 84
El acierto de Green y el fallo de Gasol marcó el desenlace, fue la frontera que separó el éxito del fracaso. Green anotó un triple a 9 segundos del final. Fue el 82-84 para San Antonio. Entonces, Lakers pidió tiempo muerto. El diseño de la jugada consistía en pasar a Gasol en zona de triple, en una esquina, y que éste distribuyera, pero todas las líneas de pase quedaron cortadas, especialmente la conexión con Kobe Bryant. Y Gasol se vio forzado a lanzar un triple a 2,9 segundos del final que no entró.
Pau, poco protagonista en ataque a lo largo de la noche, había adquirido presencia en el final del choque con 4 puntos consecutivos que pusieron a Lakers 3 arriba (82-79) a 1:02 del final. Pero una cesta de Tim Duncan y el triple de Green solucionaron la compleja papeleta.
Los Lakers afrontaron el encuentro sin Steve Blake, con Darius Morris como base titular y Chris Duhon como suplente. Un dúo impropio para un equipo de tal calibre. De hecho, a Morris le vino grande la titularidad y el rival. Mientras, el viejo Gregg Popovich optó por sacar de salida a Tiago Splitter para formar tándem con Duncan y presentar batalla a Pau Gasol y Dwight Howard.
El inicio fue extraño. Los Spurs comenzaron 2-10 con un gran Splitter y los Lakers, tras un tiempo muerto, les endosaron un parcial de 14-0 a los texanos. Con Kobe a gran nivel, Lakers controló los 2 primeros cuartos, salvo cuando puso en acción a su segunda unidad. Al descanso: 43-38. Con los locales dominando el rebote y ¿cometiendo solo 4 faltas personales?. Spurs no terminaba de centrarse. Arrastraba un 37% en el tiro de campo.
Pero estos Spurs son inasequibles al desaliento, lo que unido a su calidad les hizo no perder la cara al partido. Por eso, se llegó al final con gran equilibrio y por eso ganaron con 19 puntos y 7 asistencias de Tony Parker, de más a menos, y 18 puntos, 9 rebotes, 4 tapones y 4 asistencias de Duncan, de menos a más. Manu Ginóbili jugó finalmente, pero se vio claro que no andaba físicamente para gran cosa: 3 puntos y 3 asistencias con 1 de 8 en el tiro. Lo mejor, algunos piques defensivos con Kobe.
En Lakers, 28 puntos y 8 asistencias de un gran Bryant y 13 con 15 rebotes de Howard. Pau terminó con 10 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias en 37 minutos. Jordan Hill volvió a ser el mejor suplente y Antawn Jamison volvió a decepcionar.
Orlando 89 New York 99
Los Knicks flotan en un mar de tranquilidad, es más, en un mar de felicidad como nadie recuerda. Bueno sí, algunos sí, los viejos aficionados. Porque el equipo no empezaba tan bien desde la campaña 1993-1994.
Victoria trabajada ante unos Magic que venían de protagonizar 2 atascos monumentales en ataque ante Brooklyn Nets. Esta vez fue distinto. Los locales completaron una gran primera parte (53-49) en la que el neoyorquino-boricua Moe Harkless mostró sus credenciales: 10 puntos y 6 rebotes en 12 minutos. El novato, ex de St John’s, terminó el choque con 10 tantos, 7 rebotes y 4 tapones y fue arma importante de Magic junto a J.J.Redick y Nikola Vucevic. Aunque el equipo vivió de la pluralidad (7 miembros en dobles dígitos). Gustavo Ayón apenas pisó cancha 2 minutos.
New York esperó su momento, que llegó en el cuarto final a base de defensa. Orlando terminó metiendo 13 puntos en ese cuarto final y perdiendo 20 balones en el encuentro. Con Carmelo Anthony en 25 puntos y 8 rebotes, ganaron los visitantes, que tuvieron también a Raymond Felton y J.R.Smith con 21 puntos cada uno. Pablo Prigioni jugó 7 minutos, todos en la primera mitad. Terminó con 5 puntos y 1 asistencia.
Sacramento 86 Portland 103
Si hubo una diferencia abismal entre ambos equipos, ésa radicó en el tiple. Los locales hicieron un 1 de 11 desde más allá del arco; los visitantes, un gran 14 de 27. ¡39 puntos separaron a ambos conjunto desde el triple!.
Jugó Claver, pero solo 2 minutos. Menos da una piedra. Su bagaje: 1 rebote. Menos testimonial fue la presencia del novato Damian Lillard, otra vez esencial en el organigrama de Blazers. La perla de Portland acabó con 22 puntos, 9 asistencias y 5 de 6 triples. Fue la estrella visitante. LaMarcus Aldridge metió 19, Wesley Matthews hizo 18 y J.J.Hickson firmó un nuevo doble doble.
Los Kings no pudieron contar con DeMarcus Cousins, que sigue sancionado. Y eso es mucho. Volvió, eso sí, el novato Thomas Robinson, que brilló en la suplencia con Marcus Thornton y un Jimmer Fredette que parece por fin on fire. El que no lo está es Tyreke Evans, que hizo otro plomizo partido. Bien James Johnson y no jugó el dominicano Francisco García.