Con el mercado veraniego ya en marcha, aunque los nuevos contratos no podrán firmarse hasta el 11 de julio, las novedades no cesan de producirse. Rashard Lewis, Vince Carter, Michael Beasley y Anthony Randolph son algunos de los afectados por ellas.
Lewis ha sido despedido por los Hornets, tal y como se esperaba desde que se hicieran con él a cambio de Emeka Okafor y Trevor Ariza. Termina así la historia de uno de los peores contratos, por escasamente rentables, de la historia de la NBA, el que le hicieron los Orlando Magic en verano de 2007 a Lewis. Eso sí, los Hornets aún tendrán que pagarle los casi 14 millones de dólares que tenía garantizados la próxima temporada.
Quien no se moverá de su actual destino será Vince Carter. Los Mavs, tras muchas dudas, han decidido ejercer la opción que garantizaba los 3,1 millones de su contrato en la temporada 2012-13. Motivos puramente financieros habían hecho a Dallas plantearse prescindir de él, pero el ahorro conseguido con el traspaso de Lamar Odom y el de Kelenna Azubuike en la noche del draft parecen haber ayudado a que la decisión se inclinara del lado de Carter.
Por último, los Timberwolves han decidido dejar libres a Michael Beasley y Anthony Randolph tras declinar la opción de presentarles una oferta cualificada que les hubiera convertido en agentes restringidos.
Especialmente significativo es el caso de Beasley, número 2 del draft de 2008. El hombre que estuvo cerca de desplazar a Derrick Rose del número 1 de ese draft sigue dando bandazos por la liga sin encontrar acomodo ni acercarse al rendimiento que de él se esperaba tras su etapa universitaria. Aun así, no le costará hacerse hueco en otro plantel, ya veremos en cual, eso sí, todo indica que tendrá que adaptarse a tener menor protagonismo.