El poco afortunado final de temporada que les ha tocado sufrir a los Bulls de Chicago no parece que vaya a cambiar los planes de futuro de la franquicia. Sus responsables apuestan por su actual bloque y por mantener a Tom Thibodeau en la dirección técnica.
El general manager de la franquicia, Gar Forman, ha anunciado que no sólo ejecutarán la opción para que Thibodeau continúe la próxima temporada, agotando el máximo de 3 años que firmó en su día, sino que su intención es cerrar con él una renovación a largo plazo, algo sobre lo que ya han mantenido conversaciones desde el pasado otoño.
En Chicago se valora mucho la labor llevada a cabo por Thibodeau con su joven equipo, al que ha convertido, bajo el liderazgo de Derrick Rose, en uno de los serios competidores por el título. El traspiés sufrido en la actual fase final, tras la grave lesión de Rose y la temprana eliminación ante los Sixers, no ha cambiado para nada la percepción de los dirigentes de los Bulls.
La lesión de Rose, condiciona el corto plazo
Eso sí, la previsible ausencia por un largo periodo de Rose está obligando a replantear algunas cosas en los despachos de Chicago, conscientes de que la próxima temporada puede ser, muy a su pesar, de transición.
Los Bulls no quieren arriesgar con la rodilla de un Rose que inicia la próxima temporada un largo y multimillonario contrato de 5 años del que depende en gran medida el futuro a medio plazo de la franquicia. Por eso, el planteamiento de su recuperación es conservador en los plazos. Prefieren perder una temporada, a arriesgar el futuro de su estrella.
La previsible ausencia del base ha hecho también que se redoblen las presiones sobre Luol Deng para que no acuda a los Juegos Olímpicos de Londres. El alero británico ha dejado claro que, pese a los problemas que sufre en la muñeca izquierda, quiere estar con su selección, pero en la franquicia creen que lo mejor sería que se operase cuanto antes para poder estar con el equipo en el inicio de temporada.
Sin Rose y Deng de inicio, la próxima campaña sería aún más complicada para los Bulls. De ahí que quieran también cerrar la renovación de Thibodeau para dejar claro que, pase lo que pase el próximo año, el proyecto de estos Bulls tiene un recorrido de varios años que aún está por agotar.