La mejor serie de la primera ronda merecía ir a un séptimo partido. Memphis ha demostrado que está tejido con hilo fuerte, que tiene madera de equipo grande. El conjunto de Hollins ha igualado un 3-1 y ahora decidirá en su campo. Marc Gasol brilló en el sexto con 23 puntos y 9 rebotes.
La referencia ofensiva del partido fueron los hombres interiores de Memphis. Entre Gasol y Randolph se fueron a 41 puntos y 25 rebotes. Z-Bo fue decisivo en el cuarto final. No menos crucial fue el partidazo defensivo de Tony Allen, que en el último cuarto hizo desaparecer de la pista a Chris Paul.
Memphis tuvo un momento delicado cuando se puso 8 abajo con 8 minutos por jugar y Gasol descansaba en la banda. Entonces, apareció de la nada Haddadi, que sólo jugó 3 minutos, pero bien importante que fue su contribución en tan corto tiempo. El final del partido estuvo plagado de errores y situaciones extrañas. Parecía que nadie iba a ganar.
L.A.Clippers 88 Memphis 90 (3-3)
Era la gran oportunidad de los Clippers para cerrar esta primera ronda y dejar en la cuneta a Memphis, pero el equipo de Marc Gasol demostró que tiene mucha personalidad y un infatigable ímpetu en pos de la victoria.
Ganaron los Grizzlies y habrá séptimo y definitivo partido en el FedExForum de Memphis. Esto está que arde.
Al final, jugaron Paul y Griffin y aunque no se les viera a su mejor nivel, tampoco jugaron mermadísimos. Al menos, en apariencia.
El partido fue de los hombres altos de Memphis. En los 3 primeros cuartos, el dominador indiscutible del encuentro fue un imperial Marc Gasol, cuyo quinto y sexto partidos han sido extraordinarios. Al final del tercer cuarto, Gasol llevaba ya 23 puntos, los mismos con los que terminó el choque. Pero no hubo problema en el cuarto final, porque le tomó el relevo ofensivo un gran Zach Randolph, que terminó con 18 tantos, 16 rebotes y 3 tapones. El español se quedó en 23 con 9 rebotes, 3 asistencias y muy buenos porcentajes.
El otro hombre clave fue Tony Allen, que secó a Chris Paul en los momentos decisivos. Conley tampoco lo hizo mal. Porque los que sí que no estuvieron fueron Rudy Gay y O.J.Mayo.
Memphis perdió 20 balones, 13 de ellos en la primera parte, pero dominó con notoriedad el rebote. El equipo aguantó muy bien los envites del rival. Llegado el final del tercer cuarto con empate a 66, fue en los primeros minutos del cuarto cuando se le complicó la vida a Memphis. Los Clippers se pusieron 8 arriba (76-68) a algo más de 8 minutos del final. Gasol estaba descansando y Haddadi jugaba sus primeros minutos. Sólo fueron 3, pero el iraní hizo 2 puntos, 3 rebotes y 1 tapón en el momento en el que más lo necesitaba su equipo, que endosó al rival un inesperado parcial de 4-17 que le metió de lleno en el camino de la victoria.
El final del partido fue una cadena de despropósitos. El mayor, el protagonizado por Foye. Tony Allen acababa de fallar 2 tiros libres muy importantes con 85-89 para Memphis y 24 segundos por jugar y Foye capturó el rebote defensivo arrebatándoselo a su compañero Butler para caer con el balón fuera de la pista.
No fue el único dislate. En los segundos posteriores, Randolph falló 3 de sus 4 tiros libres y Foye intentó recuperar su error metiendo el triple de la esperanza casi al final (88-90). Fue entonces cuando la inteligencia de Gasol pudo con todo lo demás. El español, nada más recibir el triple, sacó rápido a Conley y Memphis agotó el tiempo sin que le hicieran falta. Gasol y Conley habían robado la cartera a los angelinos y habían enviado la serie a un agónico séptimo partido.
En los Clippers, Griffin acabó con 17 puntos, 5 rebotes, 6 asistencias y 3 robos, Bledsoe rindió a muy alto nivel (14 tantos y 6 pases de canasta), Evans defendió con ambición y capturó 10 rebotes y puso 3 tapones, Martin hizo una buena primera parte y Paul se quedó en 11 puntos y 7 asistencias. Mo Williams y DeAndre Jordan no aportaron nada.