En el gran partido de la jornada, Utah derrotó a Phoenix 100-88 clasificándose para los playoffs y dejando fuera al equipo de Steve Nash. Además, Chicago Bulls y Los Angeles Lakers vivieron una jornada exitosa a pesar de que ninguno de los dos jugó.
Los Bulls quedan definitivamente primeros en el Este al perder Miami en Boston en un partido en el que estuvieron ausentes prácticamente todas las estrellas de ambos equipos. Y los Lakers ganaron la División Pacífico porque su gran rival, los Clippers, perdió en Atlanta. De nada sirvieron los 36 puntos de Blake Griffin y los 34 de Chris Paul.
Utah Jazz se clasifica
Steve Nash no estará en los playoffs. Tampoco el veterano Grant Hill, ni el felizmente recuperado Michael Redd. Phoenix Suns vivirá la postemporada ejerciendo el papel de observador.
El partido de anoche era ciertamente atípico. Pocas veces se da en un calendario como el de la NBA que dos equipos lleguen a una final de este tipo, en la que se juegan ambos entrar o quedar fuera de los playoffs. Sucedió en el EnergySolutions Arena y los Jazz no desaprovecharon su ventaja como locales. Ganaron 100-88 para situarse 35-30 por el 33-32 de Phoenix. Las matemáticas les daban el pasaporte para jugar la primera ronda de playoffs.
Utah Jazz ganó por su solidez. Hizo un juego sin fisuras. Pero, sobre todo, derrotó a los Suns porque les arrasó en la pintura. El trío Millsap-Jefferson-Favors resultó demoledor. Fue la noche aciaga del polaco Marcin Gortat, que vio cómo le pasaban por encima en un partido para olvidar: 2 puntos, con 1 de 8 en el tiro, aunque captara 12 rebotes.
Millsap fue la gran estrella del choque con sus 26 puntos, 15 rebotes, 4 asistencias y 3 robos de balón. Pero no le fueron a la zaga Al Jefferson (18 puntos, 16 rebotes y 2 puntos de sutura que no le impidieron volver al juego) y el suplente Derrick Favors (13 tantos, 11 rebotes y 5 tapones). Lo dicho, el poder interior de los Jazz, domoledor. Por eso no es de extrañar el dominio del rebote local, que partió de cerrar estupendamente su aro.
Los Suns, incapaces de hacer daño en la pintura, se concentraron en el triple, pero no fue su noche y acabaron con un 5 de 23. Jared Dudley y Michael Redd fueron sus máximo anotadores con 15 puntos, el ex de Bucks los metió en sólo 20 minutos. Steve Nash sumó 14 tantos y 11 asistencias en una triste noche para él y los suyos.
Un Boston-Miami sin estrellas
Miami dio por perdida su lucha por el primer puesto con Chicago, tal y como atestigua su dejación de funciones anoche en Boston, donde dejó fuera del juego a LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh. Demostraron los de Florida que poco equipo tienen más allá de sus estrellas, metieron unos patéticos 66 puntos, perdieron en el Garden y otorgaron a Chicago la primera plaza del Este sin jugar.
Boston ganó 78-66. Rivers también protegió a sus estrella. No en vano, los Celtics no se jugaban absolutamente nada. No jugaron Rondo, Garnett y Allen y sí lo hizo Paul Pierce, que apenas disputó 18 minutos.
El partido se resume en un ataque lastimoso de los Heat, que con una regularidad mortal anotaron 17, 17, 16 y 16 puntos en cada uno de los cuartos. Un horror. Aún así, llegaron al inicio del último cuarto empatados a 50 con Boston, que tampoco hizo mucho más en esos primeros 36 minutos, pero que al menos decidió en los últimos 12.
Pavlovic fue el máximo anotador local con 16 puntos. En Miami, que perdió 24 balones, 12 puntos de Dexter Pittman y 13 rebotes de Udonis Haslem. De tanto pensar en la postemporada, el partido fue un fiasco para el espectador.
Lakers, campeones de división
Se acabó el duelo Lakers-Clippers en pos del título de la División Pacífico. Los Clippers perdieron 109-102 con Atlanta y los Lakers ganaron el título sin jugar al tener un balance de 41-24 por el 40-25 que suman los Clippers.
De nada sirvió el brutal partido del dúo Paul-Griffin. El ala-pívot acabó con 36 puntos, 8 rebotes y 17 de 23 en el tiro de campo y el base aportó 34 tantos, 8 asistencias y 4 de 6 triples. Es decir, metieron 70 de los 102 puntos del equipo. Ningún otro compañero alcanzó ni siquiera los 10 puntos. Ese desequilibrio mató al equipo.
Por Atlanta, gran partido de Joe Johnson, que destrozó al rival desde el triple al anotar un 6 de 9 para acabar con 28 puntos. Jeff Teague añadió 21 tantos y Josh Smith se fue a 18 con 10 rebotes y 5 pases de canasta.