El goteo de lesiones en las posiciones interiores de los Hornets ha forzado a la franquicia de Nueva Orleans a prescindir de uno de ellos, Chris Johnson, para poder hacer hueco en la plantilla a la entrada de otro hombre alto, el pívot Darryl Watkins.
Los Hornets tenían a sus 3 pívots –Chris Kaman, Emeka Okafor y Chris Johnson- lesionados y sin visos de jugar más en lo que queda de temporada regular, por lo que otros jugadores como Jason Smith, el mexicano Gustavo Ayón o Carl Landry han tenido que turnarse en una posición que no es la suya natural.
Por eso ahora la franquicia, que tenía el máximo de 15 jugadores en plantilla, ha decidido cortar a Johnson con el fin de poder incorporar un jugador interior que pueda echar una mano en lo poco que resta de temporada.
Johnson llegó al equipo a mediados de marzo tras ser cortado por los Blazers y recuperado de la lista de excluidos por los Hornets. Sin embargo, una conmoción le ha impedido jugar desde el pasado 1 de abril, por lo que su presencia había quedado reducida a 7 partidos en los que ha promediado 3,3 puntos y 3,1 rebotes en 12 minutos.
El jugador elegido para reemplazar a Johnson ha sido el pívot Darryl Watkins, que ha firmado por 10 días, lo que equivale a estas alturas al final de temporada. Watkins, que ya ha entrenado hoy con su nuevo equipo, conoce la NBA puesto que jugó 9 partidos con los Kings en la temporada 2007-08.
Desde entonces, ha sido un habitual de las pretemporadas de la liga, el año pasado la hizo con los propios Hornets, pero sin lograr nunca pasar el corte. Ahora, dispondrá de 4 partidos para reencontrarse con la NBA.